¿Soy compradora compulsiva de ropa femenina?

compras-compulsivas

Uff, ¡cuánto tiempo sin escribir nada! Pero ya estoy de regreso para plasmar mis sentimientos en estas líneas. Ya les había contado antes que mi feminofilia ataca por episodios; es muy intensa durante algunas semanas, y puede desaparecer por meses enteros… pues durante estos días acabo de salir precisamente de uno de esos episodios de sequía femenina en los que las ganas de vestirme y sentirme mujer fueron prácticamente nulas durante un lapso aproximado de dos meses.

¡Dos meses! Creo que mi lado femenino nunca me había abandonado durante tanto tiempo. Fue tan prolongada la ausencia de Nadia Mónica, que incluso me dejé crecer la barba ¡y hasta adquirí una cantidad considerable de ropa de hombre! ¿Por qué me sorprende esto? Por que nunca me ha gustado comprar prendas para mi guardarropa masculino. No sé si a todas les pase, pero a mí, adquirir camisas, zapatos, pantalones, suéteres, trajes, cinturones, o cualquier otro componente de la indumentaria propia de varón, me parece una pésima manera de gastar mi dinero.

Esta historia viene a colación debido a que, durante la ausencia de mi lado de mujer, al consumir digamos $1,000 en ropa de hombre, sentía que estaba gastando mucho, y pensaba dos veces al momento de pagar; o si había escogido tres prendas,al final quería dejar una, pues tenía la sensación de estar excediéndome en mis gastos. Sin embargo, ahora que mi lado de mujer ha regresado (y presiento que este episodio será muy intenso después de tanto tiempo), ya adquirí más prendas de chica, y en un par de días he gastado más dinero en ellas que lo que he gastado comprando ropa de hombre en seis meses.

¿Soy compradora compulsiva? No lo creo, pues las personas con este padecimiento experimentan remordimiento después de haber comprado, cosa que a mí no me sucede, lo que termina agravando más el problema, pues al no sentir pena alguna podría seguir comprando hasta límites preocupantes. Afortunadamente me encuentro en un momento en el que mi poder adquisitivo me permite solventar estos gastos, pero no quiero que esta situación llegue a representar un problema en el futuro (o en el presente, pues mi novia ya me ha llamado la atención a consecuencia de este inconveniente). Necesito un freno financiero de manera urgente. Trabajaré en una estrategia para remediar esta complicación y, si dicho plan tiene éxito, les estaré platicando los resultados.

¿Alguna vez les ha pasado algo similar?